Amargo regreso de la Sociedad Deportiva Huesca a su casa. Un Alcoraz vacío, sin el calor del público, asistió a la derrota ante el CD Mirandés (1-2) en la 33ª jornada de LaLiga SmartBank. Pese a que la jornada era propicia para recortar distancias con los rivales directos, los tantos de Álvaro Rey y Álvaro Peña en la segunda parte dejaron sin nada al Huesca. Mir logró el empate poco después, pero el mazazo del 1-2 fue grande y no hubo reacción.
Tras unos compases iniciales de tanteo, los azulgranas se impusieron siempre con el balón como bandera. Los acercamientos locales fueron múltiples, con un Dani Raba rápido por la derecha y Sergio Gómez buscando huecos en el costado zurdo. La más clara del inicio, sin embargo, fue de los rojinegros: un disparo de Joaquín Muñoz desde la frontal se fue por poco a la derecha de Yáñez, dejando el ambiente más helado de lo que estaba por la ausencia de afición. Enseguida, Eugeni tuvo la réplica con otro disparo. Esta vez, Limones tuvo que estirarse para evitar el gol. El Huesca comenzó a volcar el campo hacia el lado rival, pero a pesar de las intentonas no hubo oportunidades manifiestas de gol hasta la vuelta de vestuarios.
En el segundo tiempo, la entrada de Mboula dio aire fresco rápidamente al costado. En su primer balón, su chut obligó de nuevo a Limones a una gran parada. En el 63', Álvaro Rey aprovechó una pérdida local para firmar el primer gol de la tarde en los burgaleses. Apenas seis minutos después, Mir empató después de un córner con un remate magistral, de primeras y casi de espaldas. La alegría duró poco, porque Peña volvió a castigar a los altoaragoneses aprovechando un rechace posterior al centro al área.
La necesidad aumentó con el paso de los minutos, cuando los oscenses buscaron de todas las formas posibles el empate. Sin embargo, no hubo opción de hacer la igualada. El calendario aprieta: enseguida, una nueva oportunidad en Albacete para sumar de tres.
