El Freed from Desire sonó también en el vestuario del recién bautizado como Bahrain Victorious Nuevo Arcángel, y lo hizo especialmente bien. Ya que la ya tradicional celebración del conjunto azulgrana estaba precedida de una victoria de las que refuerzan. Porque llegó ante un Córdoba que fue más dominador en algunos tramos del encuentro, pero los de Hidalgo tiraron de máxima efectividad en la segunda parte, y volvieron a mostrar todo un alarde defensivo en el tramo final, para llevar los tres puntos de vuelta a Huesca y acariciar ya los manidos cincuenta puntos, que han dado paso a una nueva palabra: ilusión.
Una contra en el minuto 21 rompía con la imbatibilidad que defendían los de Hidalgo en liga desde el inicio de este 2025. Se truncaba así una gran racha, después de unos primeros minutos en los que la SD Huesca no había logrado sentirse cómoda sobre el césped del feudo cordobés. Salieron los azulgranas en una versión más imprecisa de lo habitual. Lo que aprovechó el Córdoba para hacerse con el control del juego, y pisar con facilidad el área de Dani Jiménez. De hecho, el guardameta tuvo que estirarse ya al cuarto de hora de juego en un centro que se envenenó para encontrar portería.
El gol en contra espoléo a la SD Huesca y les llevó a ganar metros, después de haberse asomado al área local de manera muy tímida a través de acciones a balón parado. Encontró algó más la velocidad de Gerard Valentín para poder acabar la primera parte por detrás en el marcador, pero en campo rival.
Y así continuó en el inicio de la segunda, logrando pronto el premio del empate. En el 48, con los mismos protagonistas que siete días antes Castellón. Vilarrasa puso el córner y Loureiro marcó. Esta vez en un cabezazo directo a la escuadra. Se abría un nuevo encuentro, con la SD Huesca reforzada. Y a punto estaba Hugo Vallejo de hacer el segundo en el 58, con un balón colgado al área de Loureiro que el 10 azulgrana cabeceó rozando el palo.
Se enrarecía algo el partido, tornandose por momentos en correcalles. Y en ese modo, Patrick Soko tiene mucho que ganar. Así, el camerunés se sacó una carrera imparable en un balón largo mientras el rival estaba todavía replegando, para dejar atrás a la defensa y asistir a Sergi Enrich en un pase horizontal que el ariete solo tuvo que empujar.
Con menos de un cuarto de hora por descontar, y una ventaja que defender, la SD Huesca volvió a demostrar que ese escenario le gusta, e hizo chocar una y otra vez ante su muro a un Córdoba que no dejó de intentarlo. Los azulgranas firmaron su tercera victoria consecutiva, once jornadas sin perder.









































