“Defensivamente somos un gran equipo. En ataque tenemos que mejorar, pero tenemos margen y trabajamos duro en ello”, eran las palabras de Cristian Salvador poniendo voz al vestuario en la semana de la visita de Las Palmas a El Alcoraz. Y añadía, “somos un equipo muy difícil de batir, peleamos siempre hasta el final”.
Los azulgranas tienen por delante tres sesiones para preparar el choque del sábado en el estadio oscense. “Llevamos seis jornadas sin perder, tenemos que seguir en esa línea, en casa hacernos fuertes con nuestra afición. El sábado viene un rival duro, tendremos que estar a nuestro mejor nivel, pelear cada balón y ojalá podamos brindar una victoria a nuestra gente”.
En lo personal, y superada su lesión de clavícula, asegura sentirse “cada semana mejor”. “Estoy cogiendo ritmo de competición, estoy entrenando bien, pero el ritmo te lo dan los partidos. Trabajo duro esperando mi oportunidad, siempre he estado a disposición del míster para cuando considere necesario, nunca he bajado los brazos”. En ese sentido, asegura que “la competencia es buena para el equipo” y que “juegue quien juegue da un gran nivel”.
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