La SD Huesca B remonta en los últimos 15 minutos en Pinilla para quedarse muy cerca de la salvación (2-3). Dos dianas de Carlos Kevin y el gol de la victoria de Manu Rico dan el triunfo a los azulgranas. El filial se queda a cuatro puntos de la permanencia con su segunda victoria consecutiva.
En un partido de luces y sombras, los azulgranas dieron la vuelta al marcador. Los primeros 45 minutos fueron una calamidad para los de Dani Aso. El Teruel se adelantó en la primera jugada tras el saque inicial, por un error de la zaga oscense que aprovechó Carlos Hermelo (1-0). Poco después, cerca de la media hora de encuentro, los oscenses recibieron otro mazazo de la escuadra turolense. En una gran jugada, Aparicio puso tierra de por medio (2-0).
Durante la primera parte se vio a un equipo sin alma, débil atrás, con un juego espeso y pocas llegadas a la portería rojilla. Tras el descanso, el guión cambió. Los azulgranas supieron contener el dominio local y lograron ganar terreno. Los intentos por meter miedo empezaron tímidamente, pero poco a poco eran más las llegadas del filial. Y en una de ellas, Carlos Kevin recortó distancias, tras una jugada combinativa que empezó por la izquierda (2-1). A raíz del gol, empezó a crecer el nerviosismo en el rival y en la grada. Los altoaragoneses se crecieron, y de nuevo, por la izquierda, llegó el empate. El ariete recibió una gran asistencia de Barba que le hizo firmar su doblete (2-2).
Una vez hecho lo difícil, el partido fue a tumba abierta. En una constante lucha de idas y vueltas, los nuestros consumaron la remontada. Primero, gracias a las intervenciones de Tiago, que evitaron una ventaja mayor. Y segundo, el gol de Manu Rico. En un tanto de pillo, aprovechándose de un rechace, el equipo logró hacer el tercero y definitivo (2-3). Marchándose del campo con tres puntos, algo que no había conseguido en toda la temporada más que un equipo. Y sobre todo, con la sensación de que todo es posible.
