La Sociedad Deportiva Huesca sumó un punto de oro ante el Atlético de Madrid en un magnífico partido de los azulgranas, que en el primer tiempo superaron a los rojiblancos y en el segundo, sobre todo al final, supieron sufrir ante las acometidas de uno de los grandes clubes de LaLiga Santander (0-0). El empate en la cuarta jornada del campeonato fue justo premio a un equipo que no rebla ante nadie. Pase quien pase por El Alcoraz, tiene garantizado que sufrirá ante los oscenses.
Una jornada más, el Huesca demostró al mundo que es capaz de combatir de poder a poder ante cualquier rival que se le presente. En una primera parte excelsa, fue netamente superior a todo un Atleti, que se vio en múltiples ocasiones desbordado por un equipo que generó fútbol de mucho nivel. En el minuto 12, Mikel Rico dispuso de la primera oportunidad con un disparo peligroso que desvió la zaga rojiblanca. Después, a Okazaki le dejó con la miel en los labios con un desvío in extremis de Felipe cuando se disponía a rematar. Seoane también dispuso de un tiro de media distancia que se marchó a córner. Rico, al borde del descanso, tuvo otro chut tras una magnífica jugada colectiva. El protagonista, en definitiva, era el cuadro altoaragonés, que incomodaba con su presión alta, pero también lo alternaba con un bloque bajo que era impenetrable para Suárez, Joao Féliz y compañía.
La segunda parte fue más equilibrada, con los indios llevando peligro sobre todo en las eléctricas botas de Joao, un incordio. Sin embargo, el grueso de las opciones de estrenar el marcador siguieron viniendo del lado local. Cabezazo de Siovas, remate desde la frontal de Ferreiro, otro chut de media distancia de Seoane... Andrés Fernández abortó con éxito la ocasión más clara de los visitantes hasta el momento: un mano a mano de Suárez en el que el uruguayo buscó casi sin ángulo batir al meta, que aguantó el envite a la perfección y cerró cualquier hueco con sus brazos. La entrada de Ontiveros dio electricidad por la izquierda, poco antes de que Gastón Silva se estrenara como azulgrana por los problemas físicos de Pedro López. Con el paso de los minutos, los de Simeone comenzaron a embotellar a un Huesca que resistió con uñas y dientes. Fernández, en el 89', desbarató con una gran parada la más clara de los madrileños, con la firma de Joao. El punto fue premio para el Huesca de las grandes citas.
