La Sociedad Deportiva Huesca cedió por la mínima ante el Girona FC en El Alcoraz, con un gol al inicio del segundo periodo de Samu Saiz en el primer partido del 2022 (0-1). Después de un primer tiempo equilibrado, los oscenses merecieron más en una segunda parte netamente de color azulgrana en la 22ª jornada de LaLiga SmartBank, pero no pudo ser. La falta de acierto y las intervenciones del meta rival privaron al cuadro de Xisco de arrancar el año sumando. Sin tiempo para lamentos, espera la visita a Cartagena.
El primer tiempo comenzó con ritmo, de área a área y con acercamientos por parte de ambos equipos. Abrió fuego primero un activo Juan Carlos Real, que volvía a ser titular. Un poderoso disparo desde media distancia fue acercándose por el camino hacia la escuadra, de donde la tuvo que sacar Ortolá in extremis. Los rivales también pisaban las inmediaciones de Andrés Fernández, que en el minuto 12 tuvo que echarse encima de Aleix García dentro del área para evitar el disparo del centrocampista. Si bien en los primeros instantes se vio un Girona dominador, con el paso de los minutos el Huesca comenzó a sentirse más cómodo y, con la solidez defensiva como principal arma, comenzó a construir hacia adelante con Juan Carlos y Nwakali llevando la manija. Al borde del descanso, la mala noticia de los oscenses fue la salida del terreno de juego de Florian Miguel, que tuvo que dejar el choque por un golpe fortuito y doloroso en la cara.
Pablo Insua entró en el lugar del francés en la segunda parte, que tuvo un guion similar: pocas oportunidades, choque equilibrado e intervenciones contadas de los guardametas. Sin embargo, en el minuto 47 llegó el golazo de los gerundenses: rechace en la frontal y tiro a la escuadra del exazulgrana Samu Saiz. No rebló un Huesca que comenzó a meter una marcha más. Mikel Rico tuvo una buena ocasión a pase de Pulido en la frontal, y, en el minuto 71, llegó una de las más claras: fue un robo de Pitta, que se plantó en el mano a mano con Ortolá y su tiro lo desvió el meta. En la continuación de la jugada, Ignasi Miquel cabeceó a gol un centro de Pulido, pero el balón había salido por la línea de fondo justo antes del centro. Fue cuando los altoaragoneses siguieron enlazando llegadas de mucho peligro: tiro de Adolfo Gaich con paradón de Ortolá, cabezazo de Insua alto en el área o chut de Pulido que impacta en la zaga. Todas opciones en las que los locales merecieron con creces el empate, pero el balón no quiso entrar. Se intentó hasta el final, con una falta lateral a la que subió a rematar Andrés Fernández.
