Tres cabezazos para tres puntos. La SD Huesca se llevó un triunfo de quilates este sábado en El Alcoraz, frenando a un Levante enrachado al que superó con una solvencia que no entraba en el guion previo, pero que se trabajó desde el ecuador de la primera parte, creciendo el equipo según avanzaron los minutos hasta el reluciente 3-0 que reflejaba el marcador al final. Los oscenses siguen demostrando que su estadio es una auténtica fortaleza, a la que añadieron un ladrillo más. Y de los grandes.
Porque los veinte partidos del Levante sin perder eran una carta de presentación imponente, y que quedó reflejada en el césped ya desde los primeros minutos. A modo de vendaval salió al campo el conjunto visitante, que al cuarto de hora de juego probó a Andrés, con un disparo de Rober Ibáñez, que encontró los tres palos, pero también los guantes del portero. No fue la única intervención del portero, que logró mantener el marcador intacto, mientras su equipo fue ganando metros y encontrando espacios.
Así, según se avanzaba hacia la media hora de juego, los azulgranas fueron despertando, con un activo Joaquín Muñoz, que le daba fluidez a las transiciones, y que encadenaba dos muy claras antes de cumplirse el 30. La primera en un pase al espacio de Sielva, al que llegaba en velocidad y definía con fuerza pero que se encontraba con el portero visitante, y después, buscando el disparo lejano en un rechace, que se iba por encima del larguero. Se animaba también Obeng, quedándose solo ante Cárdenas, pero enviando el balón al lateral de la portería al intentar superar al guardameta.
Y el despertar azulgrana tuvo su recompensa en la cabeza de Florian Miguel, que enviaba a la red la falta colgada de Óscar Sielva al área pequeña. El Huesca se adelantaba en el 38, con todo un tesoro en su bolsillo que esta vez no podía dejar escapar. Y de ello se encargó Andrés Fernández, que volvía a sacar una mano providencial al borde del tiempo reglamentario de la primera parte, enviando a córner un gran disparo cruzado de De Frutos.
La SD Huesca tenía 45 minutos para asegurar el triunfo, y Cuco Ziganda dio entrada a Marc Mateu por Joaquín Muñoz para intentar conseguirlo. Pero los azulgranas no se limitaron a aguantar la renta mínima, como ya avisaba Jorge Pulido en un remate de cabeza que atrapaba Cárdenas, aunque finalmente se anulaba la jugada por fuera de juego. Pero el capitán azulgrana lograba desquitarse apenas cinco minutos después, y en el 62 remataba dentro un córner que ponía Marc Mateu.
Se enrarecía el encuentro, con varios parones y tensión entre los dos equipos, rebajando el intenso ritmo de juego con el que se acercaban al ecuador de la segunda parte. Y allí, volvía a ser la SD Huesca la que encontraba premio, nuevamente de cabeza, rematando cruzado Juan Carlos, adelantándose a la defensa en un centro de Gerard Valentín. Con un 3-0 en el marcador y un cuarto de hora por disputarse, Cuco Ziganda sacó al terreno de juego a Soko, Carrillo, Vilarrasa y finalmente Tomeo, logrando llegar al 95 para desatar la total alegría en El Alcoraz.
