Un zapatazo de Sielva en una falta directa a la escuadra, ya en el tiempo de descuento, permitió a la SD Huesca rescatar un punto de un partido que se puso muy cuesta arriba en la primera parte. Los azulgranas tiraron de garra para reaccionar tras el segundo tiempo, después de haberse ido al descanso con un 0-2 en el marcador, fruto de la enorme efectividad del rival. Así, aunque la victoria se sigue resistiendo, el equipo vuelve a sumar, esta vez en su estadio.
Dos certeros zarpazos del filial amarillo cayeron como un jarro de agua fría sobre los intereses de los de Cuco Ziganda, obligando al equipo a remar en contra solo con quince minutos en el tiempo de partido. Porque se cumplía el minuto 15 cuando un despeje fallido de Álvaro Fernández era aprovechado por Álex Fores para adelantar a los visitantes. Tocaba apelar al espíritu del ‘No reblar’ demasiado pronto, y aunque Javi Martínez tuvo en sus botas la posibilidad de cambiar el guion en el 24, la madera lo impidió. El potente disparo del soriano se topó con el larguero.
Esa falta de acierto de los azulgranas se convertía en totalmente opuesta para al Villarreal B, que volvía a hacer gala de una efectividad máxima, esta vez a través de Javi Ontiveros, que en un potente disparo, hacía el segundo en el 34.
La reacción se convertía en una necesidad para los oscenses en una segunda parte que comenzaba con el cambio del debutante Rafa Tresaco por Gerard Valentín. El marcador apremiaba y los azulgranas daban un paso adelante, jugando en campo contrario. Pulido buscaba el gol de cabeza en el primer córner tras el descanso, y en el segundo, Loureiro sí lograba ponerla donde no llegaba el portero. Los de Ziganda acortaban distancias y este movía el banquillo para lograr aprovechar la incercia, con el respaldo del público. Entraban al césped Joaquín y Kento, en sus primeros minutos de la temporada.
Se crecía El Alcoraz y subía el ritmo del encuentro. Se animaban los oscenses, que reclamaban mano en una falta colgada al área que Pulido puso al área pequeña, pero que el colegiado no revisó al haber levantado el linier el banderín antes, en un fuera de juego también muy ajustado. En el correcalles que se tornó el encuentro en los últimos quince minutos Ziganda tuvo que hacer frente al contratiempo de la lesión de Gerard Valentín, que había sido de los más desequilibrantes tras saltar al campo en el descanso. Kanté le sustituyó.
Parecía haber logrado el Villarreal frenar el despertar de los locales, pero no contaban con el as en la manga que supone el pie de Óscar Sielva. Ya en el 92, en una falta centrada desde fuera de la media luna, teledirigía el balón a la escuadra, permitiendo a su equipo sumar un punto que respalda la reacción que se había visto sobre el césped.

