El Alfonso Murube de Ceuta guardaba el primer tropiezo de la temporada para la SD Huesca. El equipo azulgrana perdía su condición de invicto en un encuentro en el que se vio obligado a remar en contra en el marcador desde muy pronto, y se vio lastrado por la expulsión de Sergi Enrich en el inicio de la segunda parte. Consiguió hacer lo complicado, igualar con un golazo de Enol, ya en el tramo final. Pero no era el desenlace, porque hubo tiempo para que Samu Obeng hiciera efectiva la 'ley del ex' y condenar al equipo a volver de vacío.
Se encontraron los oscense con un intenso AD Ceuta que pronto lo reflejó en el marcador, cuando Koné hizo el primero. Los locales apretaban al calor de su afición, y a los de Guilló les costó encontarse cómodos e ir avanzando metros. Un disparo de Kortajarena que se fue por encima del larguero fue el primer intento del equipo, en el 27 de partido.
Fue punto de inflexión para que la SD Huesca pudiera pisar con más facilidad campo rival, aunque sin encontrar ese último pase dañino. Lo pudo aprovechar el Ceuta, para, a la contra, hacer el segundo, pero apareció Dani Jiménez, haciendo un auténtico paradón a Marcos. Y de manera consiguiente, en la siguiente acción, era Julio Alonso el que podía empatar, pero su uno contra uno al portero se fue rozando el palo.
Movió la pizarra Guilló en el descanso, y sustituyó a Pulido y Hugo Pérez, ambos con tarjeta, por Liberto y Arribas. Pero el plan de reacción del técnico no contaba con que se quedaría con un jugador menos tras la revisión de una accción de Sergi Enrich. A la SD Huesca le quedaba tirar de heróica para poder llevarse algo de su visita a Ceuta.
Manu Rico y Enol fueron los siguientes en saltar al campo, en lugar de Sielva y Luna. Con el equipo ya volcado, pudo el Ceuta prácticamente sentenciar, pero el tanto fue anulado por fuera de juego. Le daba una bola extra a los azulgranas a veinte minutos del final. Portillo salió por Jesús, con el tiempo en contra ya para los intereses del equipo.
Quedaban solo seis para el final cuando Enol firmó un auténtico golazo que parecía rescatar un punto a la SD Huesca. Pero el primer tanto del delantero como azulgrana no tuvo el premio esperado, pues hubo tiempo para que Obeng, en su estreno con el Ceuta, aprovechara el desgaste de los de Guilló con uno menos, y pusiera el 2-1 definitivo.





































