Momento de buscar un punto de inflexión. La SD Huesca B no está pasando por sus mejores resultados deportivos tras un buen inicio de curso, ya que son dos los partidos donde los oscenses llevan sin sumar puntos. El primero, en casa por la mínima contra la AD Almudévar; y el segundo, el fin de semana pasado en Los Olmos ante el CD Binéfar, también con el mismo marcador (1-0). Una dinámica que ha provocado la caída de la plantilla de los puestos de play-off, situación que quiere dar la vuelta cuanto antes. Los dirigidos por Sebas Martínez se miden al CDJ Tamarite, oponente que se encuentra en mitad de tabla, siendo duodécimo del grupo aragonés. El plantel tamaritano acumula cuatro partidos sin conocer la derrota, goleando en casa al CD Utrillas (4-1), remontando en su visita al Fuentes (2-3) y empatando contra el Atlético Monzón y Almudévar en las últimas citas por 1-1. No han tenido el gran arranque de competición en comparación de la pasada campaña, sin embargo llegan a la Base Aragonesa de Fútbol en un estado de forma muy positivo y avisando de su peligrosidad.
Los azulgranas afrontarán un gran duelo altoaragonés con el único objetivo de sumar los tres puntos, sin renunciar al estilo trabajado durante todo el curso y demostrando personalidad para levantar una situación difícil. La temporada pasada, los nuestros sacaron un buen resultado en su partido en la capital oscense ante el próximo rival, venció por 4-1 con doblete a la media hora de juego de Diego Aznar y los tantos de Ángel Pérez y Nick Butler. Una jornada en la que se empezó desde el minuto inicial con mucha intensidad y con mentalidad ofensiva, factores esenciales para jugar de tú a tú a un Tamarite que desde el inicio se ha caracterizado por ejercer muy bien una presión alta y que tiene el propósito de jugar en campo contrario. Es un adversario que empieza a mirar para arriba y que viajará a Huesca con la idea de competir por los tres puntos.