La Almozara es el próximo destino que espera a la SD Huesca B en la recta final de la Tercera RFEF, la casa del segundo clasificado, la antepenúltima visita de la temporada regular. El filial altoaragonés buscará sacar un positivo resultado el sábado contra un CD Ebro que se encuentra en plena pugna por el ascenso directo. Una cita que apunta a ser una de las mejores de la jornada en un grupo aragonés que encara las últimas jornadas de competición, dónde la plantilla de Sebas Martínez quiere terminar con un sabor dulce y apurar sus últimas opciones de estar entre los mejores de la tabla.
Actualmente, los oscenses se ubican en el décimo puesto, a seis puntos de la promoción con cinco choques por disputarse. Por lo que una buena actuación en terreno arlequinado supondría un impulso clasificatorio, y sobre todo, un chute importante de moral. El conjunto azulgrana llega al gran duelo tras caer derrotado ante el CD Cuarte en la Base Aragonesa de Fútbol (0-1), un enfrentamiento en el que se volvió a notar la falta de acierto en los últimos metros, factor que ha penalizado al equipo durante parte del curso, así como errores concretos atrás. Por su parte, la escuadra zaragozana se encuentra en una racha irregular encadenando una victoria en sus últimas tres citas. El empate contra el Atlético Monzón en casa y la derrota en Almudévar ha provocado que el Ebro se sitúe con cuatro puntos por debajo del primer puesto. Sin embargo, durante toda la temporada, los de Javier Genovés se han presentado como un oponente difícil de batir en su casa, lugar en el que sólo han perdido en dos ocasiones. Un adversario que exigirá a unos altoaragoneses que quieren reivindicarse en este tramo final.
