El equipo sigue con su plan de trabajo y este jueves se ejercitaba en el campo del IFPE Montearagón. Por delante, todavía quedan dos entrenos antes de recibir al Valladolid, el domingo en El Alcoraz.
Un partido que será algo más especial para Lluis Sastre, quien ya vistió la camiseta blanquivioleta coincidiendo, además, con Rubi en el banquillo. Sastre espera enmendar los errores del partido de Copa y poder brindar una victoria a la afición, algo que les daría “mucha moral”.
Asegura que el equipo está con muchas ganas de que llegue el domingo. Una jornada en la que se cumplirán los 300 partidos del club azulgrana en Segunda División. Una señal, decía el mallorqín, “de que el club hace las cosas bien, se ha consolidado en Segunda y esperamos que sean muchos partidos más”.
Una buena oportunidad, por tanto, de cambiar la dinámica y volver a sumar de tres en tres. “Eso siempre es positivo pero tenemos que ser conscientes que esto acaba de empezar, llevamos 5 jornadas y no hay que ponerse nervioso”.
La SD Huesca lleva los mismos puntos que la temporada pasada a estas alturas, por eso, Sastre insiste en la necesidad de estar tranquilos, “todavía queda mucho”. Además, cree que el equipo está ofreciendo una buena imagen y que cada vez está más complementado y seguro. “En este inicio de temporada solo he visto superior a nosotros al Numancia, en el resto de partidos no nos hemos visto inferiores, los resultados positivos llegarán”.
Preguntado por la competencia, el jugador decía: “Al míster le gusta ir variando y eso es positivo, mantiene en alerta a todo el mundo, no te relajas ya que sabes que puedes entrar en cualquier momento”. Al final, añadía, la decisión es del entrenador, “nosotros tenemos que entrenar todas las semanas para competir”.
