Ziganda sabe que es el momento de tirar de “personalidad, fortaleza mental y confianza en los que hacemos”. Pese a que la primera victoria se está resistiendo, el técnico confía en la fortaleza y la unión del grupo como el primer paso para revertir la situación.
“La situación a nivel profesional no es agradable, somos conscientes de lo que pasa, no nos gustan los resultados ni cómo lo estamos haciendo” reconocía, pero “esas cosas en fútbol se dan, y hay que saber llevarlo de forma que no te afecte a nivel profesional. La primera premisa es que el grupo se mantenga unido, no se rinda, que vayamos juntos en la misma dirección. Y la segunda, es hacer mejor las cosas. La primera, la tenemos y la segunda, la conseguiremos con trabajo” decía.
Y con esa premisa, el equipo va a Alcorcón, dispuesto a marcar un punto de inflexión. “A los dos nos está costando sacar los partidos. Espero un partido muy igualado, con dos equipos muy rocoso, armados y, dentro de esa igualdad, el que sea capaz de cuidar con más concentración y calidad los detalles, tendrá más posibilidades”.
Y es que Ziganda sabe cuál debe ser el camino. “Todos reclamamos una victoria, pero la tranquilidad y la confianza la tenemos que tener nosotros, nosotros somos los que tenemos que hacer las cosas bien y sacar los tres puntos. No sirve de nada darle vueltas a nivel mental a todo lo que genera el ruido externo y el no ganar. Eso no suma. Si le das muchas vueltas, empiezan las dudas y la desconfianza, que no ayudan a ganar partidos”.
Por eso, respecto a los errores puntuales que están marcando los partidos, decía, “todos tenemos errores, lo que tenemos que saber es levantarnos tras un error, madurar, y tener rabia para ser mejor y dar nuestra mejor versión”.
Y concluía con un mensaje claro, “contento no estoy, no ganamos ni nos salen las cosas, pero estoy bien. No es la primera vez que no salen las cosas como uno quiere, así es la vida real. Tienes que levantarte, trabajar y dar ejemplo. Aquí nadie se rinde”.