“Las victorias refuerzan y dan tranquilidad, pero tranquilidad la justa. Seguimos en una situación complicada y no podemos bajar ni un peldaño de concentración y exigencia”. Así de claro se mostraba el técnico azulgrana ante el importante partido de este domingo frente al RCD Espanyol. Un encuentro que colgará el cartel de completo en El Alcoraz y en el que Hidalgo espera “empezar a dar alegrías a nuestra gente”.
Enfrente uno de lo equipos que lucharán por estar arriba, por eso, el míster tiene claro que “va a ser un partido muy duro. Tenemos que dar herramientas al jugador y hacer muchas cosas bien, es un rival con mucho talento, aunque esté en un momento complicado con cambio de entrenador. Creo que, en individualidades, tenemos delante al mejor equipo de la categoría. Ahora vienen con nuevo entrenador, con ideas diferentes, y tenemos que ver qué plantea. Por nuestra parte, intentar contrarrestar, mostrar solidez y potenciar nuestras virtudes”.
Por eso el técnico pide a los suyos que no bajen el nivel de exigencia ni un minuto. “Tenemos que sentir esa necesidad de urgencia porque te hace estar alerta, tener todos los sentidos puestos en el campo y luchar cada balón como si fuera el último y, esa necesidad, no la podemos perder. Tenemos que estar al mil por mil”, decía.
Y con esa premisa, espera ofrecer una victoria a El Alcoraz. “Es importante hacerse fuerte en casa, pero no obsesionarse mucho en eso. Tenemos que hacer partidos serios, trabajados y puntuar”.
Y añadía, “queremos que nuestra gente esté orgullosa porque lo damos todo, y nosotros tenemos que darles para que sintamos ese momento de empuje, tienen que sentir la situación de urgencia igual que nosotros. Estando de nuestro lado y empujando todos juntos, puede ser mucho más sencillo”.