Victoria en el Martínez Valero después de cuatro derrotas consecutivas, un impulso que da muchísimo oxígeno a una SD Huesca que llega a la recta final con mucha vida en la pelea por la salvación: “Hemos hecho un partido perfecto defensivamente contra un equipo que te somete, el 0-2 nos ha dado mucha tranquilidad y en la segunda parte no nos han generado demasiado. Estoy contento por los chavales, pero no es suficiente, nos quedan puntos por hacer para lograr el objetivo, eso es lo que nos tenemos que meter en la cabeza. Hay que seguir empujando y necesitamos más puntos para conseguir el objetivo, cuando lo tienes en mente sales al límite como hoy”. Para esta importante victoria, el equipo volvió a recuperar la efectividad en el área rival, un factor vital para los resultados a favor: “El balón que chuta Juanjoha entrado y otros días nos pasa a nosotros, que eran ya muchas situaciones en contra, cierto es que la atención defensiva ha estado presente y las cosas nos han ido saliendo. Hay que seguir así, nos viene el Racing la semana que viene y nos lo va a poner difícil”.
Tres puntos de oro que dirigen mucho al equipo a la permanencia, más cuando el equipo atravesaba una mala racha: “Son importantísimos, sobre todo por la dinámica, el mensaje lo intentas reforzar y después de la derrota en casa ha habido un clic en el grupo y una sensación de urgencia de verdad, entras en esa situación y no sabes cuando sales y gracias a dios hemos tenido la victoria”. Otro factor importante es la portería a cero, imprescindible a lo largo de la temporada para los oscenses: “Hemos ganado nueve partidos y con este 10, todos han sido con portería a cero, sabemos nuestra fortaleza y en lo que no somos poderosos. Esta vez hemos tenido la efectividad y hemos salido enchufados, tanto los de inicio como los del banquillo. Estoy contento pero no es suficiente”.
Una de las novedades en el once fue la aparición de Balboa, que firmó una cita espectacular y a Hidalgo no se le olvidó mencionarlo: “Álex tiene un trabajo brutal, tiene muchas piernas y necesitamos ese acoso que él tiene y es diferencial. Ha estado muy cerca de su par, nos ha dado la altura que necesitamos. Iker y Mier hacen un trabajo brutal, pero hoy he creído oportuno que era el momento de Álex”. Ahora, Hidalgo y los suyos se centran en lo siguiente sin despistarse: “Es imposible que se acabe la autoexigencia, hemos tenido cuatro semanas en las que haciendo prácticamente el mismo esfuerzo y sigues en una situación complicada. Es imposible que la autoexigencia se acabe porque eso es un plus y es algo que te incita a seguir. Necesitamos a nuestra gente el sábado y debemos seguir yendo a ese límite para sumar todos los puntos que se puedan”, cerró el entrenador.
