“Me siento apenado con nuestra gente, que ha hecho una gran entrada y estaban ilusionados con ver a su equipo”, así aseguró sentirse Nacho Ambriz en el inicio de la rueda de prensa tras la derrota contra el CD Tenerife. “Tuvimos la oportunidad de irnos adelante, pero nos empatan muy rápido. Estamos cometiendo errores que nos cuestan partidos. Hemos cometido errores, pero no queda más que trabajar. El equipo es consciente de que nos está costando sacar otros resultados y hay que trabajar”, añadió.
“No me preocupa, pero sí me ocupa todo. Hay cosas que estás haciendo bien, y otras mal. Hemos salido con la confianza del triunfo de Anoeta, pero después del gol de empate, el equipo vuelve a tener dudas, y lagunas. Errores que no podemos cometer si queremos estar arriba. Solo pido calma, porque tenemos que mejorar y todos tenemos que poner un poco más de nuestra parte”, dijo el entrenador.
Insistió el técnico en esos fallos que había cometido el equipo y que están costado puntos. “No voy a quitarle el mérito a los adversarios, que hacen su trabajo, pero son errores de concentración. Faltando cinco minutos para que acabe, no podemos regalar la pelota. Yo siento que el equipo no ha logrado mantener ese equilibrio emocional. No culpo a nadie, si hay algún culpable de que no hayan salido las cosas, soy yo”.
Ambriz redundó en esa responsabilidad sobre el equipo. “No soy un tipo que saque pretextos. Por eso digo que el responsable soy yo de que no vuelva a fluir como fluía al principio. Esto no es así. Existe un trabajo y el equipo ha ido creciendo desde la pretemporada y en esas dos primeras jornadas. Tenemos que insistir más en todo ello”, concluyendo, diciendo que la derrota tiene que activar al equipo para el próximo encuentro. “Tiene que ser una cachetada para nosotros”.
