Hace más de un mes que Gonzalo Melero no disputa un partido con la SD Huesca por culpa de una pubalgia que le ha hecho pasar “unas semanas jodidas, a nadie le gusta estar lesionado”. Pero el centrocampista, que entrena al mismo ritmo que sus compañeros desde el pasado jueves, está ya “a disposición de Francisco, con ganas de sumar y ayudar al equipo”. El madrileño compareció en la sala de prensa de El Alcoraz a dos días de su previsible regreso, en la vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey ante el Athletic Club (jueves 18:30 horas). “Hay que intentar ganar, que nos hace falta. Si somos capaces de acercarnos, pelearemos la eliminatoria”.
El madrileño reconoció sufrir “más desde fuera que desde dentro, sin poder ayudar, viendo cómo luchan los compañeros. En algunos partidos hemos estado mejor que otros, pero el trabajo del equipo es bueno. Hay que seguir confiando en el día a día y corregir los errores, pero con convicción de que las cosas van a cambiar”.
Melero, que la temporada pasada en LaLiga1|2|3 anotó 16 goles, apeló a aprovechar “un momento delicado en el Athletic” por la reciente destitución de su entrenador, “para ganar, en el fútbol nunca se sabe lo que puede pasar”. Sobre la posibilidad de reservar fuerzas para el encuentro del domingo ante el Real Madrid en El Alcoraz (16:15 horas), aseguró: “El equipo no puede mirar rivales o en qué partidos es más fácil sumar. Hay que centrarse en el jueves, aunque obviamente LaLiga sea primordial. Dejarse llevar el jueves no significa que vayas a ganar el domingo. Hay que coger convicción en la Copa de que contra el Madrid también se puede ganar”.
Por último, mencionó su pasado merengue: “He estado muchísimo tiempo en la cantera del Real Madrid, he sido del Madrid desde pequeñito, he ido al Bernabéu cientos de veces y va a ser especial. Pero no creo que haya nadie en el vestuario con más ganas de ganar que yo, por mucho que haya crecido allí”, comentó.
ES
