La primera visita del año para la SD Huesca B será a Utrillas. Los azulgranas afrontarán un nuevo duelo de una segunda vuelta que promete ser de lo más ajustada. Cada partido empieza a parecerse más a una final, y cada jornada que pasa hay menos margen de error para lograr el objetivo. El equipo de Sebas Martínez ya dio el primer paso, y lo hizo con un ataque inspirado al máximo, los oscenses vencieron al CD Cuarte en lo que fue la goleada de la jornada (5-0). Esa gran victoria provocó que el filial recuperara la segunda posición de la Tercera RFEF, empatados a 29 puntos con Illueca y Tamarite. Del mismo modo, lograron recortar distancias con el liderato ocupado por el Épila, que sigue invicto, pero a tan solo cinco unidades por encima de los nuestros.
Ahora, al plantel altoaragonés les tocará afrontar una visita difícil a La Vega, casa del Utrillas recién ascendido. Pese a ser nuevo en la categoría, lo cierto es que se ha presentado como un equipo combativo que está viendo resultados en su misión de alejarse del descenso. Asimismo, se ha mostrado un club muy competitivo ante su gente, tanto que llevan desde principios de octubre sin perder. Ya son cuatro los encuentros como locales en los que no conoce la derrota: dos tablas ante Almudévar y Cariñena, y las victorias ante La Almunia y Atlético Monzón. Un escenario que se antojará complicado para un Huesca que ha empezado el 2023 con una confianza máxima.
La primera vez que ambas entidades se citaron en el terreno de juego, el filial sumó los tres puntos con goles de David García, Diego Aznar y Jaime Escario (3-1). Un choque donde el Huesca se encontró a un rival que salió con mucha intensidad y que trató de incomodar. Aquella jornada, la segunda de competición, el equipo supo reducir esas intenciones y mostró acierto goleador, una clave a seguir el domingo para seguir dando pasos a la zona alta.
