Jesús Jurado lleva desde los 20 años dedicándose a la ganadería en Sariñena. Pese a no tener tradición ganadera en su familia siempre le llamó la atención y, tras probar unos años como pastor, decidió establecerse por su cuenta y dedicar su vida a las ovejas.
Acostumbrado a la vida de una localidad pequeña y al trato diario con todos sus vecinos, la crisis del coronavirus fue como un jarro de agua fría. “Pasaba por la residencia de mayores de Sariñena y se me caía el alma a los pies, pensaba en cómo podría ayudar”. De ahí que se le ocurriera llevarles carne de cordero a coste cero.
Se puso en contacto con el alcalde de la capital monegrina para ver si la idea era viable y se pusieron manos a la obra, cada semana suministra carne para los residentes y los cuidadores. Además, la donación la ha hecho extensible a Cruz Blanca en Huesca y a la residencia La Abubilla de Yéqueda, donde también reciben sus productos semanalmente.
La idea se hizo viral y a partir de ahí se fue creando una red que en sólo 10 días llega ya a toda España suministrando carne a lugares que lo necesitan como las residencias de mayores, los centros sanitarios u otras entidades.
En ella participan varios centenares de personas entre ganaderos, industriales y estudiantes que trabajan todos a una para coordinar las donaciones con los puntos de destino del alimento.
Tras estos días, Jesús confiesa que se siente emocionado y con "sensación de bienestar" y es que ha encontrado la forma de ayudar a través de lo que más quiere.
“No sé hacer otra cosa, me encanta mi trabajo. Si naciera 100 veces, 100 veces sería pastor”, dice. Y eso que no lo tiene fácil. “En la ganadería tenemos difícil subsistencia, el sector primario está siendo maltratado”.
Así que, con esta iniciativa solidaria, han encontrado, sin buscarlo, una forma de dar más visibilidad y poner de relieve la importancia que tiene la ganadería dentro de la sociedad.
