El vestuario de la SD Huesca se lamentaba al término del partido contra el Athletic Club (0-1) de la ocasión perdida para seguir acortando puntos respecto al umbral de la permanencia. Christian Rivera era uno de los más desanimados en zona mixta: "No supimos materializar nuestras ocasiones –reconocía el centrocampista–. Yo personalmente tuve una muy clara que fallé y en esos detalles es en los que se decide un partido en esta categoría. Está claro que en todos los partidos no vamos a marcar 2 o 4 goles, pero sí tuvimos oportunidades claras en las que hay que tener la confianza que sí tuvimos las dos últimas semanas". El mediocentro azulgrana quería, sin embargo, pasar rápidamente página: "Queda solo esta noche para pensar en lo sucedido. A partir de mañana tenemos que tener la mente puesta en el viernes, en ganar al Espanyol".
También Xabi Etxeita, hoy en un encuentro especial para él por enfrentarse a su equipo del que llegó cedido al conjunto oscense, mostraba su sentimiento de amargura al término del choque: "Ha sido una pena porque hemos estado cerca apretando en la segunda parte y hemos tenido ocasiones para empatar. Veníamos de una buena dinamica y queríamos conseguir la tercera victoria. En la primera parte ha sido un partido muy igualado, con mucho balón dividido, y en la segunda hemos empujado más, pero no hemos logrado ese primer gol que nos habría impulsado a pelear por la victoria. Ahora hay que centrarse en el partido del viernes porque seguimos con la ilusión y la esperanza de lograr nuestro objetivo y para ello el partido más importante es el próximo".
Ferreiro: "Creo que merecimos al menos un punto"
Uno de los jugadores más destacados en la parte final fue David Ferreiro. El gallego volvió a tener buenos minutos después de unos partidos sin muchas opciones. "No es fácil después de haber perdido un poco de protagonismo en el último mes –apuntaba el extremo azulgrana–. He intentado tratar de revolucionar el partido y de generar ocasiones, que es lo que me pide el míster, y al final creo que he conseguido poner buenos centros y tener un par de ocasiones aunque no hayan culminado en gol. Seguiré entrenando para ponerle las cosas difíciles al entrenador".
Ferreiro también incidía en las opiniones de sus compañeros y recordaba la notable parte final del partido, en la que la SD Huesca hizo merecimientos para conseguir algo más: "El equipo ha dado la cara en todo momento, lo hemos intentado hasta el final pero el balón no quiso entrar. En la segunda parte dimos un paso adelante, empezamos a crear ocasiones y tuvimos dos o tres claras para lograr, al menos, el empate. Creo que fuimos merecedores al menos de un punto. Hubo muchos parones en el partido, se añadió muy poco tiempo... todo esto nos ha penalizado y nos vamos jodidos para casa. Pero no es momento de bajar los brazos y tenemos que seguir peleando".
ES
