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Primer equipo

Duro castigo en un encuentro marcado por las decisiones arbitrales

El colegiado se torna en protagonista en la derrota azulgrana, al anular de manera dudosa primero un gol a Okazaki y después señalar un penalti en contra

El esfuerzo de la SD Huesca en Vallecas no encontró premio, más bien castigo. La SD Huesca cayó en Madrid en su visita al Rayo Vallecano, con goles de Mario Suárez y De Frutos, en la 29a jornada de LaLiga SmartBank (2-0). Una derrota dura, en la que los azulgranas lo intentaron hasta el final, y que también tuvo una dosis de polémica. Okazaki vio cómo se anulaba su gol en el primer periodo por una posible mano, y en el segundo se señaló como tal una acción de Josué Sá en el área que costó el penalti en contra.

En un igualado primer periodo, las ocasiones cayeron de ambos lados en el feudo rayista. Álvaro Fernández tuvo que firmar una gran parada para evitar el 1-0 de De Frutos, un cabezazo despejado por el guardameta. En el minuto 18 de partido, Okazaki, también de cabeza, lograba el tanto visitante, pero el gol fue anulado después por el colegiado, que señaló mano del nipón en una acción anterior al remate. Poco después, de nuevo De Frutos inquietaba a los visitantes con un potente chut que repelió el larguero. Ferreiro, de falta directa, protagonizó el último lance peligroso de los 45 minutos iniciales.

En la segunda parte, un polémico penalti por posible mano de Josué Sá castigó a los oscenses. El árbitro acudió al VAR para revisar la acción, pero no varió su decisión. Suárez transformó la pena máxima, pero los azulgranas siguieron luchando por la igualada. En el minuto 67, Mikel Rico se encontró con la madera después de una gran jugada ofensiva de Javi Galán, pero la suerte no estuvo con los de Míchel. Poco después, de nuevo pudo cambiar la historia con dos cabezazos de Pulido y Sá, el último lo sacó la zaga vallecana casi sobre la línea. Cuando el Huesca buscaba con más ahínco el 1-1, llegó el derechazo de De Frutos desde el vértice del área, directo a la escuadra, para lograr el 2-0, que se tornó en definitivo.