Apenas tres días después del partido en Ipurúa, los azulgranas vuelven a casa para medirse al Andorra. “Hemos tenido poco tiempo y hay que cambiar el chip rápido, sacar conclusiones, quedarnos con las cosas buenas que hicimos, corregir las que no lo fueron y seguir. Pensamos ya en Andorra y en la piedra tan dura que tenemos enfrente” afirmaba el técnico en la previa de la jornada.
Respecto al rival, decía. “Es un equipo diferente, espero un partido muy exigente. Juegan muy bien, es otro estilo al de la mayoría de los equipos de la categoría, un entrenador que lleva tiempo con ellos y que juegan a lo que él quiere y, encima, lo llevan a la máxima expresión. Es un equipo que tiene mucho la pelota y maneja el juego de posición. Por eso están ahí, donde se merecen, llevan un año espectacular”.
Y añadía, “el balón no se lo quita nadie, es su estilo, tener balón e incluso tener mucha pausa, no es fácil quitárselo, a ver cómo nos comportamos. Creo que nosotros cada somos un equipo más decisivo, pero creo que este partido es otra historia por el modelo que llevan ellos”.
Los oscenses vuelven a El Alcoraz donde llevan ocho jornadas invictos. No obstante, el míster sabe que la de mañana es una prueba de fuego. “Nos está costando sacar los partidos, estamos haciendo mejores cosas que en otros partidos que hemos ganado, pero no estamos sacando resultados. Creo que hacemos más cosas como equipo, pero si no ganas, no vale. En rendimiento creo que estamos mejor, lo veo en muchas cosas, pero evidentemente hay que ganar” explicaba.
Y aunque los resultados no terminan de acompañar, Cuco Ziganda se muestra satisfecho con su equipo y la progresión. “La racha fuera de casa no es buena y es cierto que lo que vale es el resultado, pero veo una buena progresión y veo cosas que me gustan y que nos van a hacer más fuertes. Creo que estamos jugando más a lo que queremos” concluía.
