Rafa Tresaco (Sabiñánigo, 2000) será una de las caras nuevas en el ataque de la SD Huesca B para la próxima temporada. Tras su paso por Primera RFEF en el Algeciras CF, el futbolista acude a tierras oscenses para aportar rapidez y versatilidad en zonas ofensivas. “Lo voy a dar todo en cada partido, tenía muchas ganas de jugar para el club de mi provincia”, afirmó.
El serrablés se convierte en el séptimo fichaje de la 2022/23, un jugador que viene de firmar un año muy bonito en el tercer escalón del fútbol español. Tresaco militó en un equipo importarte de la nueva Primera RFEF, el Algeciras CF, donde marcó dos goles en 193’ minutos. Un futbolista que cuando ha tenido la oportunidad, la ha aprovechado. Todo en una plantilla donde hubo una fuerte competencia, y que solo se quedó a un punto de entrar en el play-off de ascenso a LaLiga Smartbank.
Anteriormente, Tresaco pasó por las categorías inferiores del Real Zaragoza hasta disputar la División de Honor Juvenil. Aunque acabó sus años de juvenil en el Racing de Santander. En su trayectoria como racinguista, el oscense llegó a participar con el primer equipo gracias a su gran papel con el Juvenil A. Primero, obtuvo el premio de debutar en Segunda B con tan solo 18 años. Y un año después, alternando como jugador del Rayo Cantabria, se estrenó en LaLiga Smartbank disputando seis choques. Ese mismo tiempo, contribuyó en el filial con cifras: marcó 4 goles en 15 citas.
Terminada su vinculación con el club cántabro. Tresaco se convirtió en un futbolista establecido en la Segunda B, pasando por el Marbella FC y el nombrado Algeciras: “Fue muy bonito, la categoría es muy emocionante. En mi último año estuvimos cerca del fútbol profesional”, contó el jugador. El filial se hace con un atacante diestro, que puede actuar en cualquier posición de arriba. Un futbolista de una calidad superior a la categoría, que quiere marcar la diferencia para cumplir objetivos: “Como serrablés y oscense, siempre he tenido ganas de jugar en el club de mi provincia. Para mí, llegar a vestir de corto en El Alcoraz sería un sueño”.
¡Bienvenido a Huesca, Rafa!
